Puntarenas, Golfito
Aleteo Tiburón Puntarenas

Es el segundo caso de desaleteo  de tiburón detectado en 15 días en el Pacífico Sur. Se estima en unos 30 los tiburones que fueron masacrados para extraerles las aletas.

Las autoridades costarricenses continúan en pie de lucha contra el aleteo de tiburón, pues esta mañana se registró el segundo decomiso de aletas de estos escualos en tan solo 15 días.

De acuerdo con lo expresado por el director del Servicio Nacional de Guardacostas, comisario Martín Arias, en horas de la mañana de este martes la lacha patrullera SNG 82-4  de la estación de Golfito interceptó la embarcación pesquera tipo “Long Line”, de casi 12 metros de eslora (largo), de nombre “Yamauke” y con  matrícula de Golfito PG-8969.

La detención ocurrió frente a Punta Banco, en aguas cercanas a Punta Burica, en el Pacífico sur de nuestro país.

Tras la inspección del barco, los oficiales del Guardacostas determinaron que la nave llevaba 120 aletas de tiburón, claramente separadas de los vástagos o cuerpos de los animales que habían sido capturados.

Dada la cantidad de aletas encontradas en los congeladores del barco, se presume que cerca de 30 tiburones fueron masacrados y lanzados al agua, lo cual está estrictamente prohibido por la legislación nacional que, en aras de evitar el desaleteo,  exige que  el producto se debe descargar entero y separar del animal una vez en tierra.

El inciso a. del artículo 150 de la Ley de Pesca y Acuicultura N°  8436 expresa que se castigará  con penas de 5 a 15 salarios base a quien posea, almacene, cultive, transporte, comercialice o industrialice en forma ilegal productos de flora y fauna acuático.

El artículo 139  de esa misma norma contempla penas de seis meses a dos años de prisión a quien permita, ordene o autorice la descarga de aletas de tiburón sin su respectivo cuerpo o vástago, en los sitios donde se descargue dicho recurso.

Es por ello que la  tripulación de la “Yamauke” fue detenida y puesta a la orden de la fiscalía de Golfito.

Además de las aletas de tiburones, la citada lancha transportaba 1.200 kilogramos de diversos productos de pesca, los cuales serán entregados al Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (INCOPESCA) para que sean subastados.

BARCO NAVEGABA CON LICENCIA VENCIDA Y TRIPULACIÓN SIN PERMISO

Además del presunto delito en el que habrían incurrido los tripulantes del “Yamauke” por el aleteo de tiburón, los oficiales del Guardacostas descubrieron otras posibles anomalías, como por ejemplo que la licencia de pesca de la embarcación había vencido el pasado 3 de  mayo.

Como si fuera poco, la tripulación, que llevaba el capitán, identificado como de apellidos Calvo Ureña, y conformada por dos hombres adultos de apellidos Castillo Alvarado y Brenes Araya, así como por un menor de 16 años también Brenes Araya, no estaban registrados en el permiso de zarpe otorgado por la Capitanía de Puertos de Golfito.

Consultado sobre la razón del cambio de tripulación, el capitán les confesó a los oficiales de Guardacostas que tuvo que optar por dichos pescadores en vista de que los miembros de la tripulación debidamente autorizada se encontraban muy tomados, por lo que tuvo que dejarlos en tierra.

Hace 15 días, el pasado 12 de junio, otro cargamento de aletas de tiburones fue decomisado por el Guardacostas durante un operativo realizado también en Punta Banco, en el Pacífico Sur.

En esa ocasión los oficiales a cargo de la patrullera SNG 82-3 interceptaron la embarcación “Elizabeth X” con 58 aletas de tiburón, razón por la cual fueron detenidos los tres tripulantes de la nave.